Ser parte de algo más

Últimamente he leído varias noticias sobre una tendencia en alza que me preocupa: el sentimiento de soledad crece cada día más en nuestra sociedad. Y qué paradoja, porque vivimos en un mundo híper conectado. Nunca antes tuvimos tantos medios para comunicarnos, pero aun así, la soledad se ha convertido en una epidemia silenciosa.

Llevo tiempo reflexionando sobre esto, desde que decidí finalizar mi etapa de tres años en Lean In. No fue una decisión sencilla, porque unirme a esta comunidad ha sido, sin duda, una de las mejores decisiones que he tomado. Aquí he descubierto algo que no sabía que necesitaba: un espacio seguro donde compartir inquietudes, aspiraciones y miedos, no solo como profesional, sino también como mujer y como persona.

Me uní a Lean In justo después de dejar mi trabajo, cuando empezaba a navegar a la deriva sin saber qué hacer ni hacia dónde dirigirme. Nunca antes había formado parte de una comunidad, y pronto entendí que ofrece mucho más que compañía y contactos laborales. Es la certeza de que tus luchas son compartidas, de que tu voz, aunque pienses que no, tiene su eco y deja una estela. Es saber que si un día tropiezas o pierdes el camino, habrá manos amigas dispuestas a levantarte.

Porque tener amigos y relaciones humanas virtuales no basta para sentir pertenencia. Lo que sucede tras la pantalla no reemplaza lo que se siente al compartir un mismo espacio, al tener una conversación mirándose a los ojos o recibir un confortable abrazo. Para sentir que formas parte, se necesita piel y presencia. Y también, algo muy importante, una causa, una misión compartida, unos valores e intereses que nos unan de verdad. Esto es lo que nos saca del individual y nos hace pensar en plural. Necesitamos dejar de mirarnos el ombligo y mirar el ombligo del mundo, el que es común a todos. Porque en este terreno de lo común es donde surge la complicidad, la sororidad, el impulso colectivo para avanzar. 

Quiero compartir todo esto porque creo que si hay cura para este sentimiento de soledad que estamos experimentando, es esta, la de ser parte de algo más y buscar hacer el bien común. Hablo desde mi propia experiencia tras haber formado parte de Lean In durante estos años. Por eso, ahora que me despido, lo último que quiero dejar es precisamente este mensaje: volvamos a encontrarnos, unamos fuerzas y construyamos en plural, porque todo sabe mejor en común y compartido.

María Marco

Directora Creativa Lean In Network Barcelona